En este trabajo el autor, a partir de la denominada "sentencia Centros" de marzo de 1999 dictada por el Tribunal de Justicia europeo, que marcó un avance significativo acerca de los criterios para la aplicación efectiva de la libertad de establecimiento, reflexiona sobre la situación actual, y de la proyección que dicha resolución tuvo en la doctrina posterior del TJUE y en las normas societarias aprobadas con posterioridad.