Fabricio Rodríguez
La energía y los alimentos han sido utilizados como instrumentos de guerra, y el conflicto en Ucrania es una expresión de ese legado, marcado por pugnas añejas entre potencias. La guerra ha incrementado las ganancias de las comercializadoras de granos, agrotóxicos y energía fósil, y ha intensificado la propagación del hambre.