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Carme Trilla Bellart
Los elementos clave que determinan la crisis actual de la vivienda apuntan a una fuerte presión de demanda de diversos orígenes, que no se ve correspondida con una oferta suficiente en cantidades ni adecuada en precios. Los principales afectados por problemas de asequibilidad de la vivienda son los jóvenes y las familias con ingresos bajos. En la distribución por quintiles de renta, las personas que viven en alquiler del primer quintil destinan el 50,7% de sus ingresos a la vivienda y los del segundo quintil, el 35,9%. Hacer solventes a estas familias es la clave. Para los del primer quintil son imprescindibles políticas de oferta de vivienda de alquiler público o social. Pero de forma más urgente también se podría establecer un sistema de concertación con propietarios privados de viviendas ya existentes, asegurándoles desde el sector público unas rentas compensatorias de los importes que estas familias no pueden pagar, ajustando el concierto al índice de referencia público.
