La pandemia del COVID 19 ha dado un impulso sin precedentes a la transformación digital pero al mismo tiempo reflejó las importantes brechas digitales existentes en América Latina.
La adopción de tecnologías digitales ha sido fundamental para garantizar durante los confinamientos una cierta continuidad en la actividad empresarial, los servicios públicos y el trabajo y el estudio desde el hogar. Sin embargo, la brecha digital—en particular la falta de internet de banda ancha de alta velocidad y de competencias digitales adecuadas— ha impedido a muchos, especialmente a los más vulnerables, aprovechar las ventajas de estas soluciones.