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Madrid, España
En el presente texto se defiende que la analogía “jurídica” o “jurisprudencial” empleada por S. Toulmin en Los Usos de la Argumentación posee un carácter eminentemente didáctico o ilustrativo y que se la puede emplear con el fin de facilitar la captación de su “teoría” de la argumentación de una forma distinta a la habitual. En este sentido, se propone que una vía adecuada para explotar las intuiciones que llevaron al autor a presentarla y hacer un uso extendido de la misma consiste en emplear la película 12 hombres sin piedad como recurso para introducir sus aportaciones a un público no versado. Se trata de defender tal propuesta aludiendo a un ejemplo particular (sobre la concepción toulminiana del rol de los modalizadores) como muestra de la potencial utilidad de dicho recurso didáctico.
In this paper it is argued that the "legal" or "jurisprudential" analogy used by S. Toulmin in The Uses of Argument has an eminently didactic or illustrative character and that it can be used in order to facilitate the grasp of his argumentation "theory" in an alternative way to the usual one. In this regard, it is proposed that a suitable way to exploit the intuitions that led the author to present the analogy, and to make an extended use of it, is to employ the film 12 Angry Men as a resource to introduce his contributions to a non-expert audience. This proposal is defended by alluding to a particular example (on the Toulminian conception of the role of modal qualifiers) as an ilustration of the potential usefulness of such didactic resource.
