Juan Manuel San Cristóbal Villanueva
En la era de la AI (Inteligencia Artificial), del Deep Learning, las redes neuronales y el procesamiento del lenguaje natural, las posibilidades de control de los trabajadores por el empresario son extraordinarias. Es momento, pues, de ejercer una atenta vigilancia para evitar la vulneración de los derechos fundamentales. Al mismo tiempo, el empresario persona jurídica ha pasado a convertirse, por mor de la normativa penal e internacional, en una «policía empresarial», de tal suerte que le corresponde vigilar, prevenir y evitar la comisión de determinados delitos, si no quiere que finalmente pueda declararse su responsabilidad penal por los cometidos en el seno de su empresa. Y junto a ello, la consagración a nivel interno de la figura del «informante», completa y complica ese panorama de vigilancia empresarial. Es el propósito de este trabajo efectuar una breve aproximación al concreto problema del «cibercontrol» del empleado, los límites de éste, y cómo cohonestar esa facultad del empresario con la cuasi-obligación que le impone la legislación penal en la prevención del delito si quiere evitarse una condena penal a la empresa persona jurídica.
In the age of AI (Artificial Intelligence), Deep Learning, neural networks, and Natural Language Processing, the possibilities for employer control over workers are extraordinary. It is, therefore, a moment to exercise vigilant oversight to prevent the violation of fundamental rights. At the same time, the legal obligations placed on corporate entities have turned them into a form of «corporate police», as required by criminal and international regulations. It is their duty to monitor, prevent, and deter the commission of certain offenses within their organization if they wish to avoid potential criminal liability for crimes committed within the company. Alongside this, the establishment of the role of an «informant» («whistleblowers») within the organization further complicates the landscape of corporate surveillance. The purpose of this work is to provide a brief overview of the specific issue of «cybercontrol» of employees, its limits, and how to reconcile this authority with the quasi-obligation imposed by criminal legislation to prevent crime in order to avoid criminal liability for the corporate entity.