El artículo aborda la lucha feminista en México para cambiar la estructura patriarcal del país, centrándose en las reformas relacionadas con la paridad de género. A pesar de los avances, estas reformas presentan desafíos, como la perpetuación de estereotipos y la promoción de roles invertidos que, en esencia, siguen alimentando la desigualdad. La investigación se centra en identificar las desigualdades que obstaculizan la efectividad de las medidas de paridad en el país.