El artículo analiza un precepto de la Ley de Inteligencia Artificial en desarrollo por la Unión Europea, que prohíbe el uso de IA para influir en el comportamiento humano subconscientemente. A través de una perspectiva neurocientífica, el estudio cuestiona las propuestas actuales, argumentando que permiten intrusiones significativas que amenazan la libertad e identidad individual. Por ello, el artículo aboga por una prohibición total de tales prácticas, sin excepciones.