La tecnología puede mejorar la gestión de la prevención. Su implementación es capaz de aportar trascendentes beneficios a las organizaciones, uno de ellos es reducir la exposición o eliminar los riesgos. Las posibilidades que ofrece la tecnología son variadas, para elegir la opción que se adapte a las necesidades de la organización se debe tener en cuenta que sea aplicable y escalable a otros departamentos, pero sobre todo que acompañe a la empresa en su crecimiento.