En la presente edición del Informe Mundial sobre Salarios se constata que los salarios y el poder adquisitivo de los hogares han sufrido un menoscabo considerable durante los tres últimos años, debido primero a la pandemia de COVID‑19 y después, cuando la economía mundial empezaba a recuperarse de esa crisis, al aumento mundial de la inflación. Los datos de 2022 disponibles hasta la fecha indican que el aumento de la inflación está situando el crecimiento de los salarios reales en cifras negativas en muchos países, lo que reduce el poder adquisitivo de la clase media y golpea con mayor dureza a los grupos de ingresos bajos. La crisis del costo de la vida se suma a las importantes pérdidas de masa salarial soportadas por los trabajadores y sus familias durante la crisis de la COVID‑19, en particular los grupos de ingresos bajos, que recibieron el peor varapalo en muchos países. A falta de respuestas de política adecuadas, en un futuro próximo podríamos presenciar unaprofunda erosión de los ingresos reales de los trabajadores y sus familias junto a un aumento de las desigualdades, lo que lastraría la recuperación económica y posiblemente avivaría aún más el malestar social.
This edition of the Global Wage Report shows that wages and the purchasing power of households have been dented considerably during the past three years, first by the COVID-19 pandemic and then, as the world economy started to recover from that crisis, by the global rise in inflation. Available evidence for 2022 suggests that rising inflation is causing real wage growth to dip into negative figures in many countries, reducing the purchasing power of the middle class and hitting low-income groups particularly hard. This cost-ofliving crisis comes on top of significant losses in the total wage bill for workers and their families duringthe COVID-19 crisis, which in many countries had the greatest impact on low-income groups. In the absence of adequate policy responses, the near future could see a sharp erosion of the real incomes of workers and their families and an increase in inequality, threatening the economic recovery and possibly fuelling further social unrest.