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Amilcare D'Andrea
En los últimos años, los estudios jurídicos comparados se han centrado cada vez más en América Latina como laboratorio vivo para el desarrollo y la aplicación de sistemas constitucionales innovadores. La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela es un texto constitucional experimental y fascinante, que logra un equilibrio fundamental entre la ecología, la economía y el control glocal, contrahegemónico, de los procesos democráticos, enraizado en una historia de anticolonialismo y evolución jurídico-constitucional. Pero los poderes financieros extraterritoriales, principalmente a través de embargos, dejan a las autoridades políticas centrales y locales (bajo las nuevas reglas de descentralización) sin instrumentos y sin medios suficientes para afrontar los problemas económicos y sociales, sobre todo tras fuertes reformas sociales o políticas de nacionalización orientadas por la Constitución. Sumado a los errores del poder político central, la clara contradicción entre los elementos constitucionales y la crisis política en Venezuela socava la búsqueda de los objetivos sociales dictados en la nueva constitución bolivariana, en particular la construcción del paradigma “protagónico” y del poder popular en una nueva declinación constitucional de la democraciaparticipativa.
In recent years the focus of comparative legal scholarship has been increasingly attracted to Latin America as a living laboratory for the development and implementation of innovative constitutional systems. The Constitution of the Bolivarian Republic of Venezuela is an experimental and fascinating constitutional text, striking a fundamental balance between ecology, economy and glocal, counterhegemonic, control of democratic processes, rooted in a history of anti-colonialism and legal-constitutional evolution. But the extraterritorial financial powers, mainly through embargos, leaves central and local political authorities (under the new decentralisation rules) without instruments and not sufficient means to face the economic and social problems, above all following strong social reforms or nationalization policies oriented by the Constitution. Adding to the errors of the central political power, the clear contradiction between the constitutional elements and the political crisis in Venezuela undermines the pursuit of the social objectives dictated in the new Bolivarian constitution, in particular the construction of “protagonico” paradigm and popular power in a new constitutional declination of participatory democracy.
