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David Hernández Martínez 
Turquía y Arabia Saudí son dos de las grandes potencias de Oriente Medio. En las principales crisis y conflictos surgidos en la región en la últimos años, ambos países han asumido un papel destacado y determinante. Las políticas exteriores de Turquía y Arabia Saudí han tenido que adaptarse a un nuevo período caracterizado por la convulsión y la incertidumbre. Las estrategias desarrolladas por los dos Estados evidencian cierta incompatibilidad en la consecución de intereses y objetivos. Las relaciones bilaterales quedan marcadas por la rivalidad en distintos puntos del entorno, con dos acontecimientos relevantes: el bloqueo sobre Qatar en 2017 y el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en 2018. El artículo analiza las relaciones entre Turquía y Arabia Saudí desde el marco conceptual de frenemy y en el período entre 2017-2021, donde priman tanto los espacios de tensión y confrontación, como los de cooperación entre los países.
Turkey and Saudi Arabia are two of the great powers in the Middle East. In the main crises and conflicts that have arisen in the region in the last years, both countries have assumed a prominent and major role. The foreign policies of Turkey and Saudi Arabia have had to adapt to a new period characterized by turmoil and uncertainty. The strategies developed by the two States become visible a certain incompatibility in the interests and goals. Bilateral relations are marked by rivalry at different spots in the surroundings, with two relevant events: the Qatar blockade 2017 and the murder of journalist Jamal Khashoggi in 2018. The paper analyzes Turkish-Saudi relations from the frenemy conceptual framework and in the phase between 2017-2021, where both areas of tension and confrontation prevail, as well as cooperation between countries.
