Transformar la educación tradicional en un modelo acorde a las necesidades actuales de formación de los perfiles profesionales, es una tarea que presenta grandes retos para todas las universidades. No sólo se requiere proveer tecnologías, es necesario habilitar otros componentes para generar un verdadero cambio en el entorno escolar. Este trabajo presenta la experiencia de cómo se gestionó un proyecto piloto de carácter institucional, utilizando tabletas electrónicas en el bachillerato de la unam y considerando que el desarrollo de nuevas habilidades en los docentes es el principal pilar que soporta el cambio, pero que además hay otros elementos del entorno que deben visualizarse de forma integral para lograr una verdadera transformación en el aula.