Ahí están, aunque a veces no se las quiere ver, ni escuchar, existen. Concretamente un 15% de la población en edad de trabajar padecen alguna patología mental, una cifra que durante las dos últimas décadas ha ido en aumento. Romper el estigma que pesa sobre estas enfermedades y vencer la escasez de recursos con la que los gobiernos dotan a sus sistemas de salud es la manera de que, al fin, estas personas puedan hacer oír su voz.