Resumen de Los sistemas de compliance penal de los partidos políticos

José Antonio Monzón Torrecillas, Pilar Moreno Cabrera

• español

  El precepto 9 bis de la Ley Orgánica 6/2002, de 27 de junio, de Partidos Políticos, introducido por la Ley Orgánica 3/2015, de 30 de marzo, de control de la actividad económico-financiera de los partidos políticos, que entró en vigor el 1 de abril de 2015, introdujo la obligatoriedad para los partidos políticos de «adoptar en sus normas internas un sistema de prevención de conductas contrarias al ordenamiento jurídico y de supervisión, a los efectos previstos en el artículo 31 bis del Código Penal». El presente artículo analiza desde el plano doctrinal los elementos definitorios de todo sistema de prevención de riesgos (compliance, en la terminología anglosajona) partiendo de la remisión que el citado precepto 9 bis efectúa al Código Penal y de los estándares y criterios generalmente aceptados en dicha materia («soft law»), así como reflexiona acerca de cuál podría ser la función del Tribunal de Cuentas en relación con el diseño e implementación de los sistemas de prevención de riesgos penales por parte de las referidas entidades. Se acompaña con un estudio empírico que los autores han efectuado respecto de los principales partidos políticos de nuestro país.

• English

  The precept 9 bis of Organic Law 6/2002, of June 27, 2002, on Political Parties, introduced by Organic Law 3/2015, of March 30, 2015, on the control of the economic and financial activity of political parties, which came into force on April 1, 2015, introduced the obligation to "adopt in their internal rules a prevention and supervision system of contrary conduct with respect to the legal framework, for the purposes stated in the Article 31 bis of the Penal Code" for political parties. From a doctrinal point of view, this article analyses the elements of any risk prevention system (“compliance”), based on the Penal Code referred to in the precept 9 bis of Organic Law 6/2002 and the generally accepted standards and criteria in this area (“soft law”), as well as the Spanish Court of Audit's potential role in auditing the design and implementation of criminal risk prevention systems adopted by the political parties. Annexed is an empirical study on the main political parties in our country.