La instalación de una nueva organización de los desplazamientos en Estrasburgo ha supuesto una poderosa inversión que supera los dos mil millones de francos. El objetivo es favorecer la habitabilidad de la ciudad a través de diferentes acciones que incluyan la realización de una línea de tranvía, limitaciones al tráfico en el casco urbano, creación de aparcamientos y la peatonalización parcial del centro de la ciudad. La cuestión es cómo evaluar la eficacia y el alcance real de estas medidas, como obtener los mejores resultados de las inversiones efectuadas.