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En pleno siglo XXI, la mortalidad materna sigue siendo un riesgo para las mujeres en todo el mundo. Solamente en 2017 ocurrieron 140 muertes maternas por cada 100 000 nacimientos, de las cuales, 22% ocurrieron por hemorragia obstétrica y 9% por abortos. El objetivo de este estudio es analizar la razón de la mortalidad materna asociada al aborto en México entre 2002 y 2018. Para ello, se realizó un análisis secundario de las bases de datos de mortalidad en México validadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y la Secretaría de Salud obteniendo los siguientes resultados: en México, entre 2002 y 2018, se observa una disminución de la Razón de Mortalidad Materna (RMM) en la mayoría de las entidades federativas; sin embargo, esta disminución no se observa en las muertes atribuibles al aborto, ya que en la mitad del país no se registraron cambios en estas defunciones. En estados como Baja California Sur, Querétaro, Coahuila y Sinaloa se registraron el doble de defunciones por aborto, mientras que en Nuevo León y Quintana Roo el número de muertes se triplicó. Estos resultados enfatizan la necesidad de incrementar los esfuerzos para garantizar servicios de salud sexual y reproductiva para todas las mujeres con el fin de evitar que éstas mueran por causas atribuibles a abortos.
In the 21st century, maternal mortality continues to be a risk for women around the world. In 2017 alone, 140 maternal deaths occurred per 100 000 births, of which 22% occurred due to obstetric hemorrhage and 9% due to abortions. The objective of this study is to analyze the ratio of maternal mortality associated with abortion in Mexico between 2002 and 2018. For this, a secondary analysis of the mortality databases in Mexico validated by the National Institute of Statistics and Geography (Inegi) and the Ministry of Health obtaining the following results: in Mexico, between 2002 and 2018, a decrease in the Maternal Mortality Ratio (MMR) is observed in most states; However, this decrease is not observed in deaths attributable to abortion, since in half of the country there were no changes in these deaths. In states such as Baja California Sur, Querétaro, Coahuila and Sinaloa, twice as many deaths from abortion were registered, while in Nuevo León and Quintana Roo the number of deaths tripled. These results emphasize the need to increase efforts to guarantee sexual and reproductive health services for all women in order to prevent them from dying from causes attributable to abortion.
