Vitoria, España
Dotarse de una regulación eficiente es un factor clave para que los mercados operan en condiciones de competencia efectiva. Los órganos encargados de legislar se enfrentan a esa responsabilidad para garantizar el bienestar de la ciudadanía e incentivar el desarrollo económico.
En esa tarea, la regulación eficiente aboga por procesos de elaboración de normas participativos en los que intervengan los operadores y la ciudadanía. Y en la medida en que uno de los objetivos se dirige a mantener mercados competitivos, las autoridades de competencia también juegan un rol para que la regulación que afecta a la actividad económica sea eficiente, justificada y libre de trabas u obstáculos innecesarios.