En el primer tercio del siglo XX se producen varios fenómenos en el mercado de seguros en España por el que se modifica la situación heredada del siglo anterior. El incremento de la competencia impulsa procesos de diversificación y cartelización del mercado. En el primer caso las compañías especializadas se convertirán en compañías generales y en el segundo caso se adoptaran acuerdos entre las empresas de seguros para controlar la competencia. En las décadas posteriores, estos fenómenos paralelos conducirán al liderazgo a determinadas compañías.