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Resumen El liderazgo educativo se ha convertido en un elemento indispensable para promover la mejora escolar. Sin embargo, considerando los avances internacionales, poco se sabe acerca de cómo detectar y visualizar el liderazgo entre los actores educativos, sean docentes o directivos, en establecimientos chilenos. La siguiente investigación aborda esta brecha, utilizando el Análisis de Redes Sociales (ARS) para examinar las interacciones de prácticas colaborativas en los procesos de enseñanza y mejora, y determinar los roles y patrones de liderazgo. Para ello se utilizó un cuestionario referido a los actores educativos de un establecimiento escolar chileno que posee trayectoria de mejora en SIMCE y otras métricas. Basado en indicadores de centralidad del equipo docente y directivo, la densidad de interacciones del establecimiento, junto con la visualización de sus sociogramas o mapas de red, este estudio se enfoca en detectar qué actores educativos se ubican efectivamente en posiciones de liderazgo. Se encuentra que aquellos relacionados con el Programa de Integración Escolar (PIE) tienen un rol preponderante, en los que la pandemia covid-19 se presenta como un escenario que resalta este papel, más allá de las jerarquías existentes. Lo anterior entrega evidencia contextualizada para las prácticas educativas y procesos de mejora escolar.
Abstract In several countries, educational leadership has become essential for promoting school improvement. However, little is known about how to detect and visualize leadership among educational actors in Chilean schools -whether teachers or management team-, considering the advances that have been made internationally. To address this gap, this research used Social Network Analysis (SNA) to examine the interactions and collaborative practices related to teaching and improvement processes, as well as to determine leadership roles and patterns inside a Chilean school. Data was gathered through a questionnaire for all educational actors working in the school, which has had an improvement in its trajectory according to the national standardized achievement test (SIMCE) and other metrics, to detect which educational actors are actually in educational leadership positions. Centrality indicators of teachers and management team, the density of interactions inside the school, and the visualization of their sociograms or network maps showed that actors associated to the School Inclusion Program (SIP) have a preponderant presence. The study argues that the covid-19 pandemic presents itself a scenario that highlights their role beyond the existing school hierarchies. This provides contextualized evidence for educational practices and school improvement processes.
