Hungría adoptó su Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial 2020-2030 en mayo de 2020 y creó nuevas organizaciones responsables de su aplicación, como el Centro de Innovación en Inteligencia Artificial, el Centro de Conocimiento sobre Regulación y Ética de la Inteligencia Artificial y el Laboratorio Nacional de Inteligencia Artificial. Entre otras cosas, la estrategia se centra en la introducción de determinadas aplicaciones y servicios de administración electrónica para un «Estado proveedor de servicios impulsado por los datos». Se trata de un grupo de investigación centrado en el uso de aplicaciones de IA por parte de los organismos públicos y la oferta central, la automatización de los procesos de la administración pública mediante la IA, la introducción de sistemas de control para su uso por parte de las fuerzas del orden, el desarrollo de sistemas de modelización complejos para simular situaciones de toma de decisiones, las aplicaciones y desarrollos para las Fuerzas de Defensa, el desarrollo de capacidades de IA para fines militares y de seguridad nacional, el desarrollo de sistemas de apoyo a la supervisión de los procesos financieros y fiscales y el desarrollo de procesos de mantenimiento predictivo. La aplicación de la IA ya está en marcha, con proyectos de IA ya implementados en relación con la administración pública. Por ejemplo, la identificación central a través del reconocimiento facial, la comunicación a través de generadores de voz, la interpretación a distancia en los tribunales, las decisiones sin administradores humanos. La autoridad fiscal y la oficina de seguridad de la cadena alimentaria también están utilizando la IA, y también están en marcha iniciativas específicas de política de datos.
Hungary has adopted its National AI Strategy 2020-2030 in May 2020 and established new organisations responsible for its implementation, such the AI Innovation Centre, the AI Regulation and Ethics Knowledge Centre and the National AI Laboratory. Amongst others, the strategy is focusing on the introduction of certain e-government applications and services for a «Data Driven Service Provider State». These include a research cluster focusing on the use of AI applications by public bodies and the central supply, automating public administration processes by means of AI, introduction of control systems for use by law enforcement, development of complex modelling systems to simulate decision-making situations, applications and developments for the Defence Forces, development of AI capabilities for military and national security purposes, development of systems supporting the oversight of financial and taxation processes and the development of predictive maintenance processes. The application of AI is already underway, with AI projects already implemented regarding public administration. For example, central identification through facial recognition, communication through voice generators, remote interpretation at courts, decisions without human administrators. The tax authority and the food chain safety office are also using AI, and specific data policy initiatives are under way as well