Felipe Marañón, Carlos Muñiz Muriel, Rodolfo Barrientos
Los estudios sobre los estereotipos de género se han enfocado en la publicidad tanto comercial como política, en especial en las campañas electorales donde se sugiere que estas percepciones surgen del medio social y permanecen como un reflejo de cultura e historia preservando normas sociales. El presente estudio busca, mediante un análisis de contenido cuantitativo, identificar los estereotipos de género utilizados en los spots políticos emitidos durante las campañas de diversos procesos electorales mexicanos de 2018, su proyección y diferencias de acuerdo con el género de la persona que aparecía como candidata o candidato. La investigación indica que los estereotipos más utilizados son los más favorables respecto de las mujeres (moderna y luchadora-transgresora) aunque los que tuvieron una mayor exposición en medios fueron los referentes a mujer sensual y mujer frágil o sometida. Los estereotipos positivos tuvieron mayor presencia en la publicidad de las candidatas, mientras que los negativos se encontraron más veces en los spots genéricos normalmente elaborados por los propios partidos.
Studies on gender stereotypes have focused on both commercial and political advertising, especially in election campaigns where it is suggested that these perceptions arise from the social environment and remain a reflection of culture and history preserving social norms. The present study seeks, through a quantitative content analysis, to identify the gender stereotypes used in the political spots broadcast during the campaigns of various Mexican electoral processes in 2018, its projection and differences according to the gender of the person who appeared as a female candidate or male candidate. The research indicates that the stereotypes most used are the most favorable with respect to women (modern and fighter-transgressor) although those who had a greater exposure in media were those referring to sensual woman and fragile or subdued woman. Positive stereotypes were more prevalent in the advertising of women candidates, while negative stereotypes were more often found in generic spots usually produced by the parties themselves.