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El escritor Leonardo Padura ha publicado un artículo titulado “Un alarido” donde expone su punto de vista sobre la situación que atraviesa Cuba.1 Dice que pudiendo ser cierto que personas pagadas hayan provocado el vandalismo para generar inestabilidad, también se ha escuchado un alarido social al que las autoridades no pueden responder solo con consignas. Padura da por hecho que nadie puede creer que la solución a los problemas de de Cuba pueda venir de una intervención extranjera y menos militar, y recuerda que todo cubano sabe que el bloqueo/embargo es una realidad, condenada muchas veces por la asamblea de Naciones Unidas. Aún así, manifiesta creer que en Cuba se ha abierto una distancia alarmante entre las esferas políticas y la calle. Ante esto dice que para que los cubanos recuperen la esperanza, se requieren diálogos así como soluciones materiales y políticas que todavía no han llegado.
Conozco a Leonardo, escribe largo y habla corto. Esta vez ha escrito corto y ha hablado largo para pedir a su gobierno que atienda el alarido ciudadano. Está preocupado. En paralelo, yo estoy preocupado por la actitud de Joe Biden respecto a Cuba, y pido al gobierno de España que (junto a otros países de la Unión Europea) pregunte a la Casa Blanca por qué el presidente ha dicho que Cuba es un “Estado fallido”, y qué se propone hacer y no hacer en la isla. Allí hay 150.000 españoles que el gobierno de Madrid no puede olvidar. Tanto más cuando un puñado de diputados sinsorgos parecen ignorarlo y se dedican a pellizcar al gobierno para que llame o no a Cuba, dictadura.
Seguridad, capital y reformas, no amenazas Cuando digo que Cuba necesita “reformas” me refiero, por ejemplo, a que Estados Unidos reclama a Cuba que ratifique el Convenio Internacional de…
