Para evitar una hecatombe entre las empresas, el legislador francés ha desplegado a partir de marzo de 2020 un máximo de medios muy diversos para ayudar a las empresas. Además de as medidas financieras, fiscales, sociales y de derecho privado, se han adoptado medidas específicas para las empresas en crisis, en principio con carácter temporal, para flexibilizar las normas en este ámbito con el fin de proteger mejor a las empresas.