En su clase magistral de clausura como profesor del Collège de France, Alain Supiot invita a un replanteamiento de la justicia social y del sentido del trabajo. La crisis social y ecológica no se superará desmontando el Estado social, sino reconsiderando su arquitectura, cuya piedra angular es el estatus que se dé al trabajo. Frente a la quiebra moral, social, ecológica y financiera del neoliberalismo, el horizonte del trabajo es su emancipación del imperio del la mercancía. Las formas de trabajo que resisten al Mercado Total, como la investigación, no son "fósiles" destinados a desaparecer, sino la simiente de una régimen de trabajo realmente humano que contemple su sentido y su contenido, es decir, la obra realizada.