Durante la vigencia del Real Decreto 463/2020 de 14 de marzo, nos hallábamos ante una paradoja temporal en los delitos de injurias y calumnias contra particulares. Y ello porque el procedimiento de conciliación previa —suspendido y preceptivo— no interrumpe la prescripción; mientras, el cómputo prescriptorio de un año seguía inexorablemente su curso.