Los medios de publicidad digital de pago utilizan dos palancas básicas para optimizar los resultados de las campañas de sus clientes. Por un lado, cuentan con una gran riqueza y volumen de datos propios, tales como hábitos de navegación, tópicos de interés y tipos de dispositivo, que permiten perfilar al usuario y estimar su predisposición a obtener determinados productos o servicios. Por otro lado, se configura en la web o app del cliente, una señal que representa el grado de cumplimiento de los objetivos de negocio por parte de los usuarios, a lo que comúnmente nos solemos referir como pixel de conversión.