Sabemos que la salud mental va a salir dañada de esta pandemia. De hecho, ya se encuentra sufriendo daños colaterales. Las iniciativas para fortalecer el bienestar emocional de los empleados, que ya eran una prioridad clara en las empresas más avanzadas, han adquirido un relevante protagonismo en un momento en el que son especialmente necesarias. La psicosociología toma posiciones y se alza en la conquista de un lugar relevante dentro de la estrategia corporativa.