Brasil representa una oportunidad de futuro para Endesa pues, de todos los países de Sudamérica donde opera esta empresa, es aquél en el que ésta tiene una menor cuota de mercado y, por tanto, mayores oportunidades de desarrollo. Pero para que estas oportunidades se concreten en una mayor presencia, será necesario que las incertidumbres actuales sobre el marco regulatorio se reduzcan y que se confirme la seguridad jurídica para los inversores privados en el sector eléctrico.