Vivimos tiempos nuevos. Existen nuevas dinámicas en España que nos demandan más que nunca ser fieles al mandato de la democracia: escuchar, dialogar, consensuar. Los retos a los que nos enfrentamos en pleno siglo XXI no pueden ser resueltos individualmente. Ya sea como parejas, como familia, como empresas o como Estados, el diálogo y el consenso son los ingredientes principales de cualquier fórmula que pretenda ser eficaz.