En números anteriores hemos presentado la relación existente entre la variación de la tasa de actividad y la de desocupación. Durante el período 1991- 1998 ambas generaron distorsiones en el mercado de trabajo. Ante esto nos preguntamos: ¿Qué llevó a algunos pobladores del Gran Buenos Aires a querer trabajar?, ¿Por qué se «empecinaron» en esto, aún conociendo las dificultades para conseguir trabajo?