El mundo de los recursos humanos en la Administración Penitenciaria es muy complejo, con mucha historia detrás, burocracia y con muchos intereses implicados ya que afecta a otras Administraciones Públicas que también deben tomar partido. Pero por encima de todo, habrá que mirar por una organización que mejore la Institución, implique una mayor profesionalización y consiga mejores resultados aún, tanto a nivel motivacional para el personal que trabaja en ella, como para conseguir un mayor porcentaje de reinserción social y reducción de la reincidencia, y por tanto, reducción de potenciales víctimas futuras y mayor seguridad ciudadana. En este trabajo se centra la autora en la formación específica del personal directivo y en posibles modelos de otros cuerpos penitenciarios, que debería acompañarse de un aumento del nivel asignado y una mayor inyección presupuestaria destinada a la formación penitenciaria.