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En el mundo globalizado que vivimos, con el intenso intercambio de información entre países, las fronteras geográficas están cada vez más permeables. Después de las grandes olas de inmigración iniciadas en 2013 en Europa, es el turno de Brasil enfrentar este desafío. El 2017 más de 10 mil venezolanos ingresaron a Brasil en busca de una vida mejor o simplemente huyendo de su país por motivos políticos o violentos. Este hecho se da por las dificultades enfrentadas por el pueblo venezolano como la crisis económica que asola el país, encontrando en Brasil un lugar en paz y estabilizado para seguir con sus vidas. El presente artículo busca verificar de qué manera Brasil podrá lidiar con las recientes olas de inmigración, si está preparado jurídicamente y administrativamente para afrontar tal desafio, utilizando para ello la base teórica encontrada en las autoras Deisy de Freitas Lima Ventura, así como Carolina Genovez Pereira y Vanessa Oliveira Batista.
