Lima es la segunda metrópoli en el mundo con stress hídrico por encontrarse en el desierto después de la ciudad de El Cairo. La provisión de agua es por lo tanto uno de los grandes desafíos en el gobierno de la ciudad.
En este contexto (2016) la Autoridad Nacional del Agua (ANA) elaboró un Plan Maestro de la cuenca del río Rímac desde su nacimiento en las cumbres de la cordillera andina hasta su desembocadura en el mar Pacífico.
En el tramo urbano, de unos 50 km, el alcalde de Lima aprobó y encargó el proyecto piloto que fue bautizado como los Bosques de Ate, en homenaje al distrito municipal donde se sitúa.
Se trata de un proyecto vitrina en la margen izquierda del río Rímac, a lo largo de una extensión de unos 4 Km y un área de aproximadamente 50 Has. La idea fuerza es la regeneración urbana de la faja marginal del río y su conversión en un parque lineal.