El Centenario de la Constitución Mexicana motiva a replantear nuestras nociones de antaño de Supremacía Constitucional en un contexto normativo contemporáneo cada vez más complejo e internacionalizado. Los Estados han invocado excepciones –basadas en la afirmación de la Soberanía Constitucional- para eximirse del cumplimiento de fallos emitidos por la Cortes Internacionales de Derechos Humanos. El presente trabajo aborda la interrogante de si dichos regímenes domésticos excepcionales permanecen, no obstante, compatibles o reconciliables con los Sistemas Regionales de Derechos Humanos de los cuales son miembros
The centenary of the Mexican constitution motivates us to reassess our traditional notions of supremacy of the constitution within the contemporary context of an internationalized and increasingly complex juridical order. States have invoked exceptions – affirming the Supremacy of their Constitutions- in order to excuse compliance with rulings issued by International Human Rights Tribunals. The present work analyses the issue whether those domestic human rights regimes remain nevertheless compatible or reconcilable with the respective Regional Human Rights Systems they are parties to