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Roberto Sanromán
Los descubrimientos tecnológicos han logrado grandes avances que benefician a las personas de modo que los impulsa a lograr sus fines existenciales progresivamente como seres humanos e integrantes de la sociedad.
Enfocándonos en los objetos centrales de este artículo, el medio ambiente y la vivienda son considerados derechos humanos trascendentales para que la persona se pueda desarrollar. Su origen, relación e interacción han sido estudiados y regulados por distintas disposiciones legales; su importancia para la sociedad mexicana obliga a las autoridades a velar por su protección con la cohesión de la sociedad y las organizaciones privadas.
Desde los orígenes del ser humano ha existido una relación imperiosa entre éste mismo, la naturaleza, y el lugar donde cohabita. Dicha relación ha sido, es y será siempre un contacto reciproco, en donde la naturaleza funge como un retrato que refleja claramente el actuar del hombre. Así como los derechos y obligaciones son meramente correlativas, la naturaleza y el hombre también; basándonos en esta analogía, el hombre actúa como el sujeto activo que comete algún daño o menoscabo a la naturaleza, mientras que ésta puede tomar el papel como la parte ofendida (sujeto pasivo) y/o al mismo tiempo el de juez. En otras palabras, es la propia naturaleza quien juzga al hombre cuando es dañada propiamente por él.
El método que se utiliza en este artículo de investigación es el deductivo, ya que primeramente se abordarán los aspectos generales del medio ambiente, la vivienda y la tecnología, y concluirá con los impactos concretos que tienen los mismos en la vida del ser humano, proveyendo una perspectiva tanto del presente, como de un futuro próximo en torno al tema aludido.
