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Jorge Fondevila Antolín
Este trabajo nace con la finalidad de realizar una reflexión sobre la «nueva» situación a la que nos enfrentamos las Comunidades Autónomas y Entidades Locales en el proceso de implementación de la e-administración en nuestras administraciones, por exigencia de la Ley 39/2015 LPAC, y ello, como consecuencia de la doctrina y declaraciones formuladas por nuestro Tribunal Constitucional en su sentencia 55/2018. Debemos señalar que algunas de las declaraciones de inconstitucionalidad o de «interpretación conforme» que formula el Tribunal resultan, de inicio, un halo de aire fresco, ante el permanente acoso que han sufrido especialmente las comunidades autónomas para la imposición por el estado central de condiciones uniformadoras que no de interoperabilidad a estas, y de las cuales podemos dar fe muchos funcionarios que hemos estado implicados profesionalmente en estos procesos. Así, en este trabajo intentamos analizar, conforme un criterio de sana critica doctrinal, algunas discrepancias o dudas sobre el contenido de la sentencia, en especial las referidas al pronunciamiento sobre el contenido de la disposición adicional segunda (disposición de esencial importancia) y el artículo 9.3 de la LPAC, ya que como observara el lector estimamos que el Tribunal ha dejado inconclusas algunas cuestiones, o bien, ha optado por decisiones que intentan arreglar decisiones claramente inconstitucionales del legislador, mediante interpretaciones que a nuestro juicio resultan excesivamente forzadas y discutibles. Finalmente, es necesario destacar que a la fecha de cierre de este trabajo se acaba de publicar el Real Decreto-ley 11/2018, de 31 de agosto, de transposición de directivas en materia de protección de los compromisos por pensiones con los trabajadores, prevención del blanqueo de capitales y requisitos de entrada y residencia de nacionales de países terceros y por el que se modifica la Ley 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, por el cual se demora la entrada en vigor de las previsiones establecidas en la Disposición final séptima de la LPAC en dos años, argumentando que resulta necesario implementar medidas de colaboración e interoperabilidad entre administraciones para un adecuado desarrollo de esta normativa, utilizando como una de las justificaciones para la aprobación de esa norma el contenido de esta sentencia lo que demuestra la importancia de sus consideraciones en el desarrollo futuro de la e-administración, ya que la misma ha supuesto una llamada de atención sobre la improcedencia de los usos utilizados hasta este momento por el estado central y la necesidad de replantear los mismos.
This work was born with the purpose of carrying out a reflection on the «new» situation that we face the Autonomous Communities and Local Entities in the process of implementation of e-administration in our administrations, by requirement of Law 39/2015 LPAC, and this, as a consequence of the doctrine and statements made by our Constitutional Court in its judgment 55/2018. We must point out that some of the declarations of unconstitutionality or «agreed interpretation» formulated by the Court are, initially, a breath of fresh air, given the permanent harassment suffered by the autonomous communities for the imposition by the central state of conditions uniforms that do not interoperate to these, and which we can attest to many officials who have been involved professionally in these processes. Thus, in this paper we try to analyze, according to a criterion of sound doctrinal criticism, some discrepancies or doubts about the content of the sentence, especially those referring to the pronouncement on the content of the second additional provision (provision of essential importance) and the article 9.3 of the LPAC, since as the reader observes, we believe that the Court has left some questions unfinished, or has opted for decisions that attempt to resolve clearly unconstitutional decisions of the legislator, through interpretations that in our opinion are excessively forced and debatable. Finally, it is necessary to point out that as of the closing date of this work, Royal Decree-law 11/2018, of August 31, has been published, transposing directives on the protection of pension commitments with workers, prevention money laundering and requirements for entry and residence of third-country nationals and amending Law 39/2015, of October 1, on the Common Administrative Procedure of Public Administrations, which delays entry into force of the provisions established in the seventh final provision of the LPAC in two years, arguing that it is necessary to implement measures of collaboration and interoperability between administrations for an adequate development of this regulation, using as one of the justifications for the approval of that standard the content of this sentence which demonstrates the importance of its considerations in the future development of e-administration n, since it has been a wake-up call about the inappropriateness of the uses used up to this moment by the central state and the need to rethink them.
