Giovanna Kuele, Marco Cepik
Los conflictos armados crónicos y las crisis humanitarias requieren de una capacidad de mantenimiento de la paz mejorada por parte de Naciones Unidas en el siglo 21. Un aspecto de tal capacidad es la eficacia de sus estructuras de mando y control, que son altamente dependientes de un apoyo de inteligencia apropiado. Para evaluar críticamente tal afirmación, este artículo analiza el caso de la misión de estabilización de Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (MONUSCO). Tanto las estructuras de inteligencia relacionadas con la organización de la misión (G2, JMAC, y JOC) como sus prácticas, son examinadas mediante entrevistas al personal de MONUSCO, una visita al cuartel general de la misión en Goma, informes de Naciones Unidas y documentos, así como literatura especializada. Los resultados indican que la inteligencia contribuyó a mejorar el C2 en MONUSCO jugando un papel clave en los niveles táctico (neutralizando grupos armados) y operacional (compartiendo información y proporcionando awareness situacional para toda la misión). No obstante tuvo un impacto menor en el nivel estratégico, debido a una brecha crónica entre las estructuras de Naciones Unidas en Nueva York y la misión en el terreno.
Persistent armed conflicts and humanitarian crises require an improved United Nations (UN) peacekeeping capability in the 21st century. One aspect of such capability is the effectiveness of its command and control (C2) structures, which is highly dependent on proper intelligence support. In order to critically evaluate such claims, this article analyzes the case of United Nations Organization Stabilization Mission in the Democratic Republic of the Congo (MONUSCO). Both the organization of the mission-related intelligence structures (G2, JMAC, and JOC) and their practices are brought to light by interviews with MONUSCO staff, a visit to mission’s headquarters in Goma, UN reports and documents, and specialized literature. The findings indicate that intelligence contributed to improve C2 at MONUSCO by playing a critical role at the tactical (neutralizing armed groups) and operational (sharing information and providing mission-wide situational awareness) levels. Nonetheless, it had a lesser impact at the strategic level, due to a persistent gap between the UN structures in New York and the field mission.