La finalidad de este artículo es validar, mediante la revisión de fuentes secundarias, la hipótesis de que al proponer planes de mitigación voluntarios previos al establecimiento de una organización en un territorio determinado, incorporando en su discusión a las comunidades que se verán afectas por la actividad de la organización, la sensación de exclusión que experimenta la comunidad respecto de las actividades corporativas se convierta en una de inclusión, integrando a la sociedad a sistema de la organización empresarial, generando un círculo virtuoso que evite los conflictos de los que hemos sido testigos en los últimos años, afectando gravemente la economía y el crecimiento de nuestro país.