Transphobia is typical in Latin American Societies which in hand leads to rejection of a sexual diversity.
The way in which a person acquires their sexuality and gender is usually acceptable if it is with in the established norm. But if it challenges the status quo, it is in for serious consequences. In this article we consider the body as a mechanism by which a person on their free will defines it by an interpretation of cultural meaning, from which we evaluate the experience of a young Honduran Woman who is a Tran activist and as consequence of her militancy and her gender option, suffers constant threats to her physical integrity. Although, precautionary measures have been granted by the Inter-American Commission on Human Rights, she believes that her life is not guaranteed and she opts to flee her country in search of better conditions to express her gender identity, at the cost of losing commitment to her social struggle.
La transfobia propia de las sociedades latinoamericanas conduce a situaciones de rechazo a la diversidad sexual. La forma como cada persona se apropia de su sexualidad y su género suele ser considerada aceptable si se le encuadra en la norma establecida, pero si la desafía, enfrenta graves consecuencias. En este artículo consideramos al cuerpo como un mecanismo mediante el cual cada ser humano, a partir de su voluntad, se lo apropia interpretándolo con un significado cultural, a partir de lo cual valoramos la experiencia de una joven hondureña que es activista trans y que como consecuencia de su militancia y su opción de género, sufre amenazas constantes a su integridad física. A pesar de que cuenta con medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ella considera que su vida no se garantiza y opta por huir de su país en busca de mejores condiciones para expresar su identidad de género a pesar de que perderá el compromiso que tiene con su lucha.