Según el Convenio Europeo del Paisaje, por “paisaje” se entenderá cualquier parte del territorio tal como la percibe la población, cuyo carácter sea el resultado de la acción y la interacción de factores naturales y/o humanos. Esta definición, alude al significado del paisaje como una construcción social y cultural ligada al territorio, un concepto que es objeto y sujeto a la vez, medio físico e imagen colectiva o individual del mismo.
Esta consideración es fundamental para entender el valor patrimonial del paisaje donde se asienta el pueblo de Alfafar.
El artículo trata de explicar sintéticamente la metodología llevada a cabo por el Estudio de Paisaje, que constituye el análisis, valoración y definición de los objetivos marco, necesarios para el desarrollo del Catálogo de Protecciones (Sección natural y de paisaje), que se desarrolló junto con el equipo de Javier Hidalgo (Sección Cultural). Tanto el Estudio como el Catálogo se dirigen a una propuesta de Infraestructura Verde, que tratará de aprovechar las oportunidades del paisaje ya consideradas en la caracterización previa, para dar solución a los conflictos paisajísticos que presenta Alfafar. Se hace particular mención a los paisajes ordinarios, que en el caso de Alfafar son las áreas de huerta periurbana, con un gran número de conflictos pero con abundantes valores latentes.