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Maryorie Dugaro, Lia Lezama
Este artículo muestra los resultados hallado en un análisis de contenido sobre la representación mediática del modo de vida de la pobreza aplicado a los noticieros televisivos venezolanos La Noticias, del canal público de Venezolana de Televisión, y El Observador, del canal privado Radio Caracas Televisión. Los resultados del tratambiento de la pobreza por los noticieros con respecto a los temas con que se la asocia se yuxtaponen a los que se relacionan con los actores que hablan sobre ella. La pobreza es descrita por el canal público como una serie de necesidades satisfechas por el Estado; el canal privado la muestra como una serie de carencias de las que el gobierno no se ocupa. Ambos noticieros dan versiones opuestas del mismo fenómeno, lo que traduce la existencia de dos realidades mediáticas paralelas.
The results of a content analysis on poverty media representations applied to two Venezuelan TV new shows, one of a public channel -Venezolana de Television's La Noticia- other of private on -Radio Caracas Television's El Observador-, are shown in this paper. The results about the treatment of poverty, linked with some thematic categories, are juxtaposed to the results about the actor who speaks it as a group of needs neglected by the government. The two TV new shows considered in this paper broadcast opposed versions of the same phenomena. It confirms the existence of two parallel media realities.
Cet article présente les résultats d'une analyse de contenu sur la représentation médiatique du mode de vie de la pauvreté appliquée à deux journaux télévisés vénézuéliens: La Noticia, de la chaîne publique Venezolana de Televison, et El Observador, de la chaîne privée Radio Caracas Television. Les résultats du traitemnt de la pauvreté, eu égard des thèmes auxquels elle est associée, se juxtaposent à ceux qui se rattachent aux acteurs qui en parient. La pauvreté est décrite par la chaîne publique comme un ensemble de besoins satisfaits par l'État; la chaîne privée la montre comme une série de besoins négligés par le gouvernement. Les deux fournissent des versions opposées du même phénomène, ce qui traduit deux réalités médiatiques paraliéies.
