Supongamos que una compañía se ha visto beneficiada por la información proporcionada por un trabajador que se acaba de incorporar procedente de una empresa de la competencia. El trabajador sabe que dicha información es un valor añadido y trata de beneficiarse de ello al negociar las condiciones de su incorporación, pero ¿hasta qué punto podría tener responsabilidad penal la empresa que se beneficia de dicha información? ¿Qué características debe reunir la información para que su apoderamiento se considere ilícito? Y, sobre todo, ¿qué se entiende por «secreto de empresa»? A continuación trataremos de dar respuesta a todas estas cuestiones.