Emilio Ontiveros Baeza, Diego Vizcaíno Delgado
Apoyada en Internet y en los avances en microelectrónica y computación, la digitalización ha dado lugar al nacimiento de nuevos modelos de negocio globales y eminentemente tecnológicos, reconfigurando la estructura y modificando la lógica de muchos mercados.
En este nuevo contexto, fundamentos del crecimiento económico como la innovación y el capital humano tecnológico pasan a jugar un papel todavía más crucial. España, que se inscribe en el club de países de inserción digital moderada, adolece de claras deficiencias en estos ámbitos tan cruciales, requiriendo un rediseño de las políticas públicas para aprovechar y distribuir equitativamente los beneficios que otorga el progreso tecnológico.