Hablar de nueva televisión quizás sea demasiado arriesgado teniendo en cuenta que la de toda la vida, la lineal, sigue teniendo su audiencia, pero la fiebre de los contenidos, la capacidad transmedia que aporta la tecnología y los nuevos players que han irrumpido en el mercado con productos y fórmulas revolucionarias sí modifican el panorama televisivo. No deja de ser irónico que un medio que muchos matan cada año esté en una fase de absoluta transformación y con audiencias que ya querrían para sí mismos muchos otros medios.