Paul Spicker
Se examinan en este artículo las distinciones entre discapacidad e incapacidad de trabajo, desde una perspectiva tanto teórica como operativa. Cuando hablamos de discapacidad aludimos principalmente a la limitación funcional en la actividad que se lleva a cabo de ordinario; la incapacidad de trabajo se refiere a las personas que no pueden trabajar a causa de su estado de salud. Aunque ambos términos se superponen, son conceptualmente distintos. Una persona puede ser discapacitada pero no incapacitada para trabajar, e incapacitada para trabajar sin ser discapacitada. Para las políticas que se practiquen es importante clarificar estas distinciones: las prestaciones de seguridad social por discapacidad están sujetas a que se las otorgue en base a principios diferentes de los aplicados en las de incapacidad. Consideramos las consecuencias en lo que respecta a los sistemas en desarrollo.