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Wouter van Ginneken
La sociedad civil apoya con entusiasmo el concepto de pisos de protección social y, en particular, la adopción de la Recomendación sobre los pisos de protección social, 2012 (núm. 202), de la OIT. La creación de los pisos nacionales de protección social representaría un gran avance en la reducción de la pobreza y la desigualdad así como en el empoderamiento de la población mundial. La sociedad civil tiene el convencimiento de que un planteamiento basado en los derechos humanos es el más efectivo para proyectar medidas para empoderar a la población y establecer pisos de protección social sostenibles. En cuanto a la implementación de garantías de protección social basada en los derechos humanos, esta medida presenta cuatro aspectos específicos que hay que destacar: a) respeto por los derechos y la dignidad de las personas que son titulares de derechos a la seguridad social; b) plena participación de la sociedad civil; c) cobertura universal en el ámbito local, nacional e internacional, y d) y especial atención a los grupos vulnerables. Tras la 101.ª Conferencia Internacional del Trabajo en 2012, cincuenta y nueve organizaciones de la sociedad civil fundaron la Coalición por el Piso de Protección Social, con dos objetivos principales: supervisar y contribuir a la implementación universal de pisos de protección social en la esfera local y nacional; y promover el concepto de piso de protección social en la formulación de políticas globales, como en el caso de las conversaciones sobre el programa para el desarrollo posterior a 2015.
