Luis Alberto Reygada
Los mexicanos elegirán a un nuevo presidente el próximo mes de julio. Aunque en este país el voto es obligatorio, su utilidad sigue siendo cuestionable: la mayoría de los escrutinios se caracterizan por un nivel de fraude poco común. Víctima regular de estas irregularidades ampliamente documentadas: el candidato de la izquierda Andrés Manuel López Obrador.