La designación del representante se tornó facultativa con la entrada en vigor de la Ley de Medidas de Agilización procesal. La introducción de este modelo no ha quedado exenta de críticas pues, se ha visto en el mismo, el intento del legislador de equiparar la persona jurídica con la persona física a la vez que ha propiciado diferentes conflictos de intereses. Por un lado, el relativo a la coincidencia entre imputado y representante y, por otro, el concerniente a la figura de testigo y representante. Todas estas cuestiones serán abordadas haciendo mención a las soluciones ofrecidas por el Derecho comparado.