El texto analiza cómo Dante concibió la educación en la justicia a través de los denominados “contrapasos” en la Divina Comedia. Luego de una introducción sobre la arquitectura de la obra y propósito del autor, se detiene en la didáctica dantesca frente a los diferentes pecados: sufrir el contrario de la culpa o la exageración de la acción pecaminosa. El “contrapaso” además es concebido dentro de lo justo conmutativo. Presenta ejemplos encontrados en el Infierno y Purgatorio dantescos. Muestra la relación entre justicia, reciprocidad y orden.